El pasado viernes 29 de junio culminó el primer ciclo del Taller de Formación de Voluntarios y Voluntarias desarrollado por el Equipo de Extensión del Sitio de Memoria Ex Clínica Santa Lucía. 

La intención de esta iniciativa es acercar la temática de Memoria y Derechos Humanos a diversos jóvenes interesados de manera personal en aprender sobre estas materias, así como en colaborar en la gestión y difusión del Sitio de Memoria Ex Clínica Santa Lucía. Este interés resulta de particular importancia para nuestra Asociación, toda vez que este recinto de memorias es un espacio autogestionado, que no recibe recursos públicos para su resguardo y mantenimiento, lo que hace imperioso el trabajo comprometido y desinteresado de diversos voluntarios y voluntarias.

Sorpresa causó –precisamente– entre los participantes, el conocer que este tipo de espacios de reflexión y aprendizaje colectivo subsistan sólo gracias al compromiso y entrega de diversos compañeros y compañeras que no reciben ingreso alguno por su trabajo al interior de éste y otros Sitios de Memoria, siendo su único afán el visibilizar la trayectoria histórica que ha tenido este inmueble en diversos momentos de su existencia, destacando por cierto el periodo trágico en que sirvió como centro de detención, torturas y exterminio bajo el mando de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA).

El Taller contó con dos módulos, divididos en Memoria y Derechos Humanos el primero, e Historia del Sitio de Memoria Ex Clínica Santa Lucía en el segundo. En ambas jornadas se abordó el concepto de Derechos Humanos en perspectiva histórica, tanto para el caso de Chile como el extranjero; el valor del patrimonio en la gestión de sitios de memoria y el proceso de memorialización en nuestro país; así como la importancia del testimonio y el relato en el rescate y puesta en valor de los sitios de memoria. En este aspecto, los participantes pudieron compartir y conversar con sobrevivientes del recinto clandestino Clínica Santa Lucía, comprendiendo desde otra perspectiva la importancia de la existencia de estos espacios para el diálogo intergeneracional y el traspaso de experiencias de organización y lucha social y política.

La experiencia, que contó con una decena de participantes, espera convocar a los interesados para que se conviertan en futuros voluntarios y voluntarias que integren junto a nosotros/as el Equipo que mantiene con vida este lugar de memorias autogestionado y autoconvocado.